lunes, 27 de julio de 2009

Curiosidades Venezolanas


| Panorámica sector Plaza Venezuela |

Dame la colita: En las batallas que se libraban en la época de la independencia, no había suficientes caballos como para que todos los soldados montaran uno. Así que gran parte de los soldados,se veían en la necesidad de cubrir grandes distancias a pie. Por eso, cuando les tocaba subir una pendiente, le solicitaban al soldado que iba a caballo, mula o burro: Dame la colita, en otras palabras, dame permiso para agarrarme de la cola del animal para subir con menos esfuerzo la pendiente. Se quedó para siempre 'Dame una colita'.

Corotos: Antonio Guzmán Blanco, quien fue tres veces presidente de Venezuela tuvo una educación con fuerte influencia francesa, fue diplomático acreditado en ese país. En su estadía por el país europeo, su mujer se aficionó mucho por las pinturas del pintor francés, Jean Baptiste Corot, teniendo una respetable colección, de la cual no se separaba. Cuando vivían en Caracas, cada vez que se mudaban de casa, cosa que hicieron con mucha frecuencia, le indicaba a los empleados que embalaban los enseres: Tengan mucho cuidado con los 'Corots', es decir las pinturas. Los empleados fueron generalizando la orden convirtiendo en 'corotos' toda clase de cosas propias de una casa.

Macundales: Para abrir picas, en el proceso de exploración de la industria de los hidrocarburos en Venezuela, se utilizaron unos machetes ingleses de marca Mc Undale. Los trabajadores, le dieron el nombre de Macundales, cada día, a la hora de terminar la faena, decían: llegó la hora de recoger los Macundales (machetes) y así se ha quedado, hasta el día de hoy, recoger tus macundales significa recoge tus cosas y vete.

Échale pichón: En Venezuela, cuando se le pide un esfuerzo adicional a alguien para desarrollar alguna tarea que requiere algún esfuerzo se le dice 'échale pichón'. En la época en la que no había acueductos ni sistemas de distribución del agua, ésta se extraía con bombas manuales que tenían una palanca que decía 'Push On'. La utilización de esta palabra para decir que pusieran a funcionar las bombas, derivó en pichón. Échale pichón era: Dale a la bomba.



| Vista arérea Stadium Universitario |

Santa Capilla en Caracas




| Las fotos fueron tomadas en julio 2009 |

Esta Iglesia de estilo gótico es una replica en menor escala de la Santa Capilla de París "Saint Chapelle".

Las obras artísticas que tiene dan fe de su valor histórico. La basílica posee un gran altar, todo el recinto está rodeado de vitrales y una obra inmensa de Arturo Michelena decora una de sus paredes. Las lámparas de bronce también son un elemento de gran belleza y sobre el piso se pueden ver los nombres de algunos personajes de la história que yacen enterrados bajo el suelo sagrado de la iglesia.
Los orígenes de Santa Capilla se remontan al año 1567, cuando se fundó La Ermita San Sebastian en el lugar que hoy ocupa Santa Capilla, es decir, en la esquina de ese mismo nombre, sobre la Avenida Urdaneta, a una cuadra hacia el norte de la Plaza Bolívar.

Guzmán Blanco encomendó la ejecución de la obra a Juan Hurtado Manrique. El 5 de Agosto de 1926 el Papa Pio XI la designó Basílica Menor. Se localiza en la Avenida Urdaneta, Esquina de Santa Capilla, a una cuadra de la Plaza Bolívar. Su construcción fue realizada en el año de 1883.

Cuentan que fue el mismo Diego de Losada quien la mandó a construir para cumplir con un voto que hiciera en su patria cuando resolvió lanzarse a la conquista del valle de Caracas, por lo que merece ser la primera iglesia en la nueva ciudad. Ya construida la ermita, se le dio el nombre de San Sebastián, por ser el Santo Patrono contra las fechas envenenadas de los indios, y proteger de esta forma, con el auxilio del santo, a los conquistadores de los ataques de los indios de la zona. Para el año de 1640 se cambia el nombre de la ermita y de dedica a San Mauricio.

La ermita original fue destrozada por un incendio cerca de 1600. Se reconstruyó nuevamente y fue abatida nuevamente en 1641 por un gran terremoto, cuando sólo se salva la imagen del santo. Para el año 1667 se vuelve a construir, pero esta vez se hace con ladrillos, cal y madera. Por más de un siglo permanece en pié, hasta que sufre el embate de un nuevo terremoto, el de 1812. Nuevamente es reconstruida, pero esta vez queda la torre sin concluirse.

Para el momento de escribir esta nota la iglesia está en muy buen estado, tanto en el exterior como en su interior. En el interior aún se están terminando algunas remodelaciones en las naves laterales.